Puedo ya comunicar que D. Amadeo RODRÍGUEZ MAGRO, actual Obispo de la Diócesis de Plasencia, ha sido designado como mi sucesor. Un nuevo Obispo para esta Iglesia milenaria de Jaén.
Quiero agradecer al Santo Padre la aceptación de la renuncia a esta diócesis, que presenté el pasado mes de septiembre de 2015, al cumplir los 75 años. Así lo determina la legislación canónica de la Iglesia. Agradezco también a Su Santidad haya querido que sea el Administrador Apostólico de la Diócesis, hasta que D. Amadeo tome posesión, en principio fijada para el día 28 del próximo mes de mayo.
2. Se trata para mí de un momento esperado, de una página que se cierra para abrirse otra nueva en mi vida. Como siempre, lo pongo todo en las manos del Señor, y quiero darle gracias por los años que me ha permitido ser Pastor “en su Nombre” de esta querida diócesis, a la que he servido desde el primer día y lo haré hasta el último momento. Nada me he guardado para mí. Ha sido todo para sus fieles. Desde mi oración continuaré sirviéndola mientras lo permitan mis fuerzas.
Debo también dar gracias a todos los giennenses, tanto de la ciudad como de la provincia y fuera de ella: A los sacerdotes, sin cuya ayuda callada y constante, no hubiera podido desarrollar mis tareas de obispo; a los religiosos, religiosas y consagrados, con quienes he compartido muchas horas y conozco su eficacia en las tareas a favor de la evangelización y su apoyo; a todos los demás fieles, colaboradores en la sementera y afianzamiento del Evangelio en estas tierras, desde las familias, catequesis, enseñanza, cofradías, asociaciones, medios de comunicación y demás grupos cristianos y personas particulares en sus parroquias. Gracias de corazón a todos: autoridades, instituciones, a todo el mundo.
En este año jubilar extraordinario de la misericordia pido tengan también misericordia para conmigo. Espero que mis fallos y limitaciones, propias de todo ser humano, no me los tengan en cuenta. Sepan que han sido fruto sólo de mis deficiencias humanas. Por mi parte nada tengo en absoluto contra nadie, todo lo contrario. Rezaré por todos. Puedo asegurárselo.
3. Finalmente, y es lo más importante de mi carta: quisiera pedir el favor a todos, de forma especial a cada uno de los sacerdotes, que reciban a don Amadeo con los brazos abiertos, como solemos decir.
Miremos en él a un sucesor del Colegio de los Apóstoles, que viene a estas tierras, generosas y recias, a entregar su vida, sin reserva de ninguna clase. Estoy seguro de ello, pues le conozco muy bien. Su experiencia de Pastor, su preparación y su talento lo descubrirán muy pronto. Pueden ya alegrarse por ello. Su perfil es de un hombre de Dios, sencillo, piadoso y muy cordial. Su especialidad es la catequesis y su espíritu misionero y andariego.
Desde este momento les pido que él sea ya el protagonista en esta Iglesia, llevado de la mano del Señor.Preparemos con ilusión su llegada para que se encuentre bien, desde el primer instante, como me sentí yo, desde aquel día caluroso de un dos de julio del año 2005.
A la Santísima Virgen de la Cabeza, a San Eufrasio, mártires y santos de la Iglesia de Jaén encomendamos su ministerio episcopal, para que sea fecundo en frutos de misericordia y evangelización.