Mediante el piadoso ejercicio del Santo Vía Crucis la Iglesia medita la Pasión de Jesús como camino de fe y de salvación. La semana de la fe tuvo su inicio en este piadoso Vía Crucis presidido por la imagen de Jesús del Amor en su Prendimiento en la soleada tarde del sábado 9 de noviembre. Inusual estampa la de contemplar al Señor del Prendimiento bajo la luz del sol, e inusual también que se acerque a los mayores que tanta admiración y emoción derramó a su encuentro con ellos y su despedida. El Vía Crucis transcurrió desde la residencia de mayores hasta la parroquia, un largo trayecto pero cargado de fe y devoción, con la luz de Cristo en nuestros corazones y en las velas que portaban todos los fieles. Las catorce estaciones inspiradas en unas meditaciones del Cardenal Martini fueron leídas por miembros del recién formado grupo joven parroquial "Juan Pablo II" y miembros de la Hermandad del Prendimiento. Entre estación y estación sonaron los sones de la Banda de Cornetas y Tambores de la Humildad de nuestro vecino pueblo de Torreperogil al que agradecemos su asistencia y a que nos hayan solemnizado este Vía Crucis. Al concluir, se celebró la Eucaristía de inicio de esta Semana de la fe, insistiendo en las lecturas en creer en un dios cercano y vivo. Esta es nuestra fe.
