En la Tarde de ayer 2 de febrero, una tarde desapacible y fría amenazante de lluvia se ha celebrado la Bendición de los tradicionales roscos de la Candelaria, antes de la Procesión, donde la parroquia se encuentra abarrotada de fieles, niños y mayores, que en el momento de la bendición levantan y ofrecen sus roscos al sacerdote para que se les eche el agua bendita, los protagonistas han sido los niños con la ilusión que les transmiten los mayores, nuestro templo se llenó de alegría con el sonido de los niños que estaban ansiosos de comerse los apetitosos roscos ya bendecidos.