El pasado 23 de octubre se realizo el envío de catequistas. Como todos los Domingos en torno al altar nos reunimos para celebrar el misterio de la muerte y resurrección del Señor, como representantes de la catequesis parroquial, se nos invitó, a que cada uno de nosotros, nos preparásemos a vivir esta celebración para que el compromiso que profesemos, lo cumplamos con responsabilidad y fidelidad, unidos siempre a Jesús, nuestro Maestro, podamos llevarlo a buen término. Queremos hacer libre y generosamente la renovación y el envío a nuestra misión como catequistas, cumpliendo con el mandato de Cristo: “Id por todo el mundo y proclamad la Buena Noticia a toda criatura. El que crea y se bautice, se salvará, pero el que no crea, se condenará”. Durante el curso muchos niños, jóvenes, van a ser ayudados a profundizar en la fe que recibieron. Los catequistas desempeñan esta tarea, propia de la Iglesia y en nombre de nuestra comunidad.