Comienza el Adviento, tiempo de silencio. Este
sábado por la tarde en misa de 7,30 h. comenzamos la Eucaristía con la bendición
de la corona de adviento. El grupo joven
Juan Pablo II se hizo cargo de encender la primera vela de adviento. Encendemos esta
vela porque queremos alumbrar, porque
queremos tener una señal que pueda ver el que viene hacia nosotros. Es un signo
externo de nuestra disposición interior de esperanza. Cristo, en su evangelio,
nos invita a "velar y a estar preparados, porque no sabemos cuando llegará
el momento". Por eso, nos
comprometemos a prepararnos, y le pedimos a Dios, nuestro Señor, su gracia y su
fuerza para cumplir fielmente estos propósitos.
